Cinesiterapia activa
Activa asistida: se entiende como el siguiente paso en la movilización de una articulación. Se aconseja en aquellos animales neurológicos que requieren de soporte para sostenerse en pie o en pacientes que durante el movimiento generen una tensión muscular tal que reduce su rango de movimiento. Puede realizarse en estación, en cinta terrestre, o en agua con la ayuda de soportes y elementos de sujeción.
Activa no asistida: es el movimiento de una articulación por medio de la contracción muscular activa. Se trabajan los músculos agonistas y antagonistas mediante ejercicios específicos o circuitos. El principal objetivo de la cinesiterapia activa es la recuperación propioceptiva, los reflejos espinales, reeducación de la marcha, coordinación y equilibrio durante la marcha junto con tono y fuerza de los músculos antigravitacionales y de movimiento.
Activa resistiva: consiste en la aplicación de una fuerza exterior opuesta al movimiento fisiológico de la articulación. Pueden usarse pesas, cintas elásticas, chorros a contracorriente etc… Está contraindicada en fracturas inestables, anquilosis, inflamaciones o hernias discales agudas.